Viña Tarapacá presenta un ambicioso plan con el que busca conservar las especies nativas y endémicas y recuperar el ecosistema del Fundo Tarapacá, ubicado en el Valle del Maipo.
Los cerros que rodean el Fundo Tarapacá constituyen el hábitat para una gran diversidad de flora y fauna endémica y nativa, por lo que Viña Tarapacá inició en 2016 el trabajo para conservar parte de las más de 2.000 hectáreas de bosques nativos que rodean los viñedos y reparar así las áreas degradadas al interior del predio.
Es por esto que el plan maestro, puesto en marcha en 2017, tiene por objetivo restaurar quebradas y crear una red de corredores biológicos que restablezca la conexión entre el macizo de Cantillana y el Río Maipo a través de los viñedos del predio.
El plan reintegra en total 110 hectáreas de vegetación nativa, 70 desde el reemplazo paulatino de plantaciones forestales y viñedos de laderas a partir de la facilitación de un proceso de restauración pasiva y 40 a partir de la creación de corredores biológicos en el interior de áreas cultivadas.