La vacuna desarrollada por los británicos de AstraZeneca-Oxford está siendo duramente cuestionada, ya que un número importante de europeos han denunciado que, luego de vacunarse, presentaron coágulos y alergias.
Así ya van 14 países europeos que han decidido suspender la administración de esta vacuna, entre los que se encuentran Italia, Francia, España y Alemania. Por eso que el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, salió a defender la vacuna y declaró que es “segura” y “extremadamente eficaz”.
Chile también tiene contratos comprometidos con el laboratorio británico. Se estima que las primeras 500 dosis, llegarán en abril, por lo que aún no se han utilizado en el proceso de inmunización. No obstante, el ISP la aprobó el 27 de enero y la organización declaró recientemente que no tomará medidas porque no hay evidencia suficiente de que “los eventos tromboembólicos presentados estén asociados a la administración de la vacuna”.