El pasado 10 de enero, el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin), informó que se cancela la alerta amarilla que regía sobre el Complejo Volcánico Nevados de Chillán, desde 2015.
El complejo, ubicado en la región de Ñuble, habría estado al menos siete años con esta alerta.
Desde el organismo, aseguran que, a partir de octubre de 2022 que no se presenta actividad superficial en el macizo. Pero mantuvieron la alerta amarilla en el Nevados de Chillán, por actividad interna.
Asimismo, la información fue expuesta por medio de un informe, que concluye que no hay suficiente material o energía expulsada a la superficie.
Álvaro Amigo, subdirector nacional de Geología (s) del Sernageomin, señaló que “este fue un ciclo eruptivo que nos dejó bastantes enseñanzas, donde intensificamos la vigilancia a través de sensores satelitales”.
Cabe destacar que, entre abril de 2018 y marzo de 2020, el lugar estuvo en alerta naranja. Por otra parte, la actividad volcánica que hubo durante todos estos años, generó varios cráteres pequeños. Dando paso a uno más grande, que se le llamó Nicanor.
“Es importante destacar que se mantendrá una zona de peligro de 500 metros alrededor del cráter activo, atendiendo que pudiesen presentarse eventos puntuales asociados a la actividad del volcán”, agregó Mauricio Tapia, director nacional (s) de Senapred.
En consecuencia, la localidad de Las Trancas, fue una de las más afectadas tras la formación de algunos domos de lava. Que trajeron consigo explosiones menores, junto con caída de ceniza fina, que afectó a la zona.