Cirugías reprogramadas. Esa fue una de las consecuencias de la realización de una fiesta clandestina de funcionarios del Hospital Carlos Cisternas de Calama. Según informó el diario El Mercurio de Calama, son 14 los funcionarios que están en cuarentena preventiva luego de participar de esta celebración fuera del horario laboral y junto a sus familias.
Entre los asistentes había dos portadores de Covid-19, los que "encendieron las alarmas" debido a que podrían haber contagiado a los demás. "Se hace el catastro y solo se van a cuarentena preventiva los contactos que la Seremi de Salud determina que son contactos estrecho, por lo tanto, no es una cuarentena hospitalaria", explicó la subdirectora médica del Servicio de Salud de Antofagasta (SSA), Yoselyn Castillo.
Las autoridades no descartan que se realice un sumario interno.