Se trata de la Inmobiliaria Providencia que fue sancionada por la Superintendencia de Medio Ambiente a pagar una multa de 217 millones de pesos por ruidos en la construcción de un edificio en el sector de Parque Krahmer.
En una resolución exenta la Superintendencia de Medio Ambiente multó a la Inmobiliaria Providencia a pagar 360 unidades tributarias anuales (217 millones de pesos) por infringir el nivel de presión sonora permitido en horario diurno, en la construcción de un edificio de diez pisos en el Parque Krahmer, afectando a más 2.000 personas. Esta medida respondió a las denuncias interpuestas por los vecinos del sector, que después de muchas gestiones infructuosas fueron escuchados.
“Antes que comenzarán a construir nos reunimos con la empresa, quienes nos presentaron un panorama maravilloso en cuanto prevención, pero nunca cumplieron. La presión sonora era de 73 decibeles, aunque la norma decía que no puede exceder 55, y en momentos llegaba a 100. Todo esto generó efectos negativos en la población”, comentó Virginia Coronado, presidenta del Comité de Desarrollo Villa del Rey.
“Sentimos que la Superintendencia se preocupaba más por mantener el trabajo de la inmobiliaria que por la salud de la gente. Les dieron muchos plazos, después le rebajaron la multa, recalificándolas de graves a leves”, agregó la dirigente.
Algo similar señala con respecto al municipio asegurando que “el año pasado algunos vecinos, se reunieron con la Dirección de Obras de la Municipalidad, quedamos de acuerdo en hacer una Mesa de trabajo, que nunca se ejecutó. Tampoco hubo voluntad de la Municipalidad para colaborar con nosotros, como vecinos”, señaló.
Ahora la empresa dispone de 15 días hábiles para apelar al dictamen de la Superintendencia, que ha generado una de las mayores multas por contaminación ambiental, que se han cursado en el país.