Trabajadores, a través de los sindicatos 1, 2 y 3 de la mina Chuquicamata, presentaron una querella criminal en contra de Codelco y del director del hospital de Calama, puesto que denuncian que accedieron a las fichas médicas de los trabajadores sin autorización.
Esta situación habría desencadenado alrededor de mil despidos en la mina, despidos que eran justificados por “problemas de salud” que presuntamente estaban descritos en las fichas médicas.
Los dirigentes de los sindicatos indicaron que llegarán hasta las últimas consecuencias para esclarecer los hechos descritos.