En medio del debate público sobre la propuesta de José Antonio Kast de instaurar un “Gobierno de emergencia” si llega a la Presidencia, fue la propia Camila Vallejo quien recordó que, según ella, esa fórmula ya la han debido aplicar desde el inicio del actual mandato. La ministra vocera aseguró que los primeros años del gobierno de Gabriel Boric estuvieron marcados por crisis profundas que obligaron a actuar bajo un carácter de emergencia.
Vallejo señaló que uno de los escenarios más complejos fue la Macrozona Sur, donde —afirmó— la violencia rural había aumentado más de un 200% en 2022, obligando al Ejecutivo a intervenir. “Hoy día podemos decir que hay una disminución del 70%”, afirmó, atribuyendo los avances a medidas de seguridad implementadas en la zona.
La secretaria de Estado también apuntó a la crisis migratoria, asegurando que, al asumir, las fronteras estaban “desprotegidas” y con tecnología inactiva para controlar el ingreso irregular. Según su versión, el despliegue de militares y nuevos sistemas de fiscalización permitió reducir en 48% la entrada ilegal, pese a que 2022 registró el mayor peak de migración irregular en Chile, con casi 800% de aumento.
Finalmente, Vallejo sostuvo que gran parte del escenario se arrastraba desde antes del cambio de gobierno, mencionando el estallido social, la pandemia y el ingreso de líderes del Tren de Aragua entre 2017 y 2019, quienes —remarcó— “tenían visa en Chile”.