Este jueves se dio a conocer que el Gobierno no tiene los recursos para condonar la deuda universitaria. Esto fue reconocido por el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, quien puso en duda el cumplimiento de una de las promesas más esperadas de la campaña del presidente Gabriel Boric.
"Ciertamente no tenemos los recursos", señaló el titular de la cartera de Educación en una entrevista en Radio Pauta, y agregó que "si bien es parte de nuestro programa, hay un compromiso muy claro. Pero también debemos ser muy claros en que cuando hay restricción de carácter fiscal, y en eso tenemos que ser muy responsables"
Por otro lado, este miércoles su par de Hacienda, el ministro Mario Marcel, explicó detalles similares sobre condonar el pago del Crédito con Aval del Estado a miles de estudiantes y jóvenes que, tras años insertados en el mercado laboral, siguen sin terminar de pagar su deuda.
"El CAE no ha dejado de estar en el programa de Gobierno, pero tenemos que tener claro que no podemos poner la carreta delante de los bueyes", expresó Marcel.
Cabe destacar que, según cifras del Ministerio de Educación de julio 2022, más de un millón de chilenos están endeudados para pagar sus estudios universitarios.
Condonación del CAE
El CAE se creó en 2005, bajo el Gobierno de Ricardo Lagos, con la promesa de permitirle a los estudiantes con menos ingresos acceder a la educación superior, sin embargo pronto se convirtió en un inconveniente para ellos.
Este mecanismo de financiamiento junto con otros instrumentos como el Crédito Solidario o el Corfo, consolidaron el endeudamiento como medio para acceder a la educación a costa de intereses muy elevados.
La condonación de este crédito ha sido una demanda histórica del movimiento estudiantil chileno.
Es por esto que al preguntarle al ministro Ávila si había un "error" del presidente Boric al haber levantado una expectativa de la condonación universal del CAE, mencionó que "cuando hablamos de una universalidad, siempre pensamos que todo el mundo va ser beneficiado de alguna manera".
"Y no no es un error; desde el principio se señalaron tres principios para una medida como esta. Que tenía que ser justa (...) que sea progresivo y gradual. Hay distintas fórmulas, hay que poner una fórmula que permita distinguir entre tipo de deudores".